El valor de los frutos… y del trabajo compartido
Continuamos avanzando con ilusión en el proyecto del Huerto Escolar. A pesar de que este mes ha estado marcado por la lluvia, el entusiasmo no se ha detenido. Aunque en algunos momentos no hemos podido entrar directamente al huerto, hemos seguido visitándolo, observando su evolución y realizando mejoras desde el exterior.
- Cosecha de verano que aún da sus frutos
Las plantaciones de verano siguen ofreciéndonos sus últimos regalos: berenjenas, pimientos y tomates continúan activos, aunque con menor producción. Gracias al clima mediterráneo, podemos seguir disfrutando de estos cultivos más tiempo del habitual. - Innovación en el riego
Seguimos avanzando en la instalación de un sistema programable de riego localizado (por goteo), una mejora que permitirá optimizar el uso del agua y mantener el huerto en las mejores condiciones. - Aprendizaje en la poda de invierno
Los alumnos están participando en el proceso de poda de invierno, aprendiendo a distinguir entre especies autóctonas e invasoras, y comprendiendo los efectos negativos que estas últimas pueden causar en el ecosistema. - Mantenimiento y salud de las plantas
Progresivamente, las distintas clases están trabajando en la poda de arbustos y árboles para mejorar su ventilación y prevenir plagas como cochinillas, araña roja y hongos. También han aprendido sobre la poda de palmeras, plataneras y arbustos ornamentales, comprendiendo cómo cada especie requiere un cuidado diferente.
Pero en este mes no solo hemos recogido frutos del huerto, también los frutos del esfuerzo, la cooperación y la dedicación. Cada visita, cada tarea y cada mejora son el resultado de un trabajo en equipo en el que todos aportan algo valioso. Porque en nuestro huerto escolar, tan importante como lo que crece en la tierra es lo que crece en quienes la cultivan.